En el mundo del caballo, los vicios de cuadra como el aerofagia (cribbing), el balanceo (weaving) o las patadas al box suelen generar mucha preocupación —y con razón— porque son un claro síntoma de que algo no está funcionando bien.
Sin embargo, uno de los mitos más extendidos es que estos vicios son contagiosos entre caballos.
La realidad es clara: no existe evidencia científica que demuestre que los vicios de cuadra se contagien.
Cuando ciertas marcas o profesionales utilizan este argumento para vender productos “milagro”, lo hacen desde la ignorancia o, directamente, desde la deshonestidad.
¿Por qué varios caballos pueden desarrollar el mismo vicio?
A simple vista puede parecer que un caballo “enseña” a otro a morder la puerta, a balancearse o a dar patadas. Pero lo que realmente sucede es que todos los caballos de ese entorno están sometidos a los mismos factores de estrés.
Y, como seres vivos, buscan mecanismos de escape para aliviar ese malestar.
Por tanto, si varios caballos de la misma cuadra desarrollan los mismos hábitos, no es un caso de imitación, sino una señal de que el manejo y las instalaciones no están cubriendo sus necesidades básicas.
Los verdaderos culpables
- Falta de salida al paddock o pradera
- Ausencia de interacción social
- Aburrimiento por vivir en boxes pequeños y sin estímulos
- Alimentación insuficiente o mal distribuida
- Deficiencias de ventilación e iluminación
Estos son los factores que generan estrés y, en consecuencia, los vicios de cuadra.
La conclusión
Los vicios de cuadra no se transmiten como un virus. Se transmiten como el estrés.
Si varios caballos muestran el mismo comportamiento en una instalación, la solución no es aislar al caballo “problemático”. La verdadera solución es revisar el manejo y mejorar las condiciones de bienestar.
En resumen: Si varios caballos desarrollan el mismo vicio en una cuadra, el problema no son los caballos. El problema es el manejo.